“El Rito Escocés Antiguo y Aceptado en la sociedad de la incertidumbre: la iniciación masónica como un aprendizaje de ser, ver y estar”, conferencia inaugural de las Grandes Tenidas de Primavera 2018 del SCME, por Gabriel Jaraba

Las Grandes Tenidas de Primavera 2018 del Supremo Consejo Masónico de España, celebradas en el Z:. de Barcino del 13 al 15 de abril, fueron inauguradas por una conferencia, abierta al público, pronunciada por Gabriel Jaraba 33º, Gran Canciller de Asuntos Interiores de esta jurisdicción masónica. Titulada “El Rito Escocés Antiguo y Aceptado en la sociedad de la incertidumbre: la iniciación masónica como un aprendizaje de ser, ver y estar”, fue una presentación del Rito Esocés al público en general y una consideración de esta tradición bajo el punto de vista social, antropológico, político, simbólico e iniciático.

“Iniciático no quiere decir únicamente algo transmitido en el marco de una tradición, por más que esta merezca la mayor consideración (cosa que no siempre sucede, puesto que hay unas tradiciones de las que hay que huir como de la peste y otras contra las que hay que luchar para que sean abolidas cuanto antes mejor). Lo iniciático es lo que se comunica y se aprehende mediante la experiencia directa porque cualquier mediación no podría dar cuenta de su verdadera realidad y esencia, y lo que siendo vivido de manera personal e intensa nos transforma”, afirmó en la introducción, clarificando la naturaleza de la iniciación masónica: “La iniciación masónica es, pues, una iniciación a la tolerancia. Contar con las razones de los otros, respetar y comprender sus motivos, dar espacio a los intereses de los demás; eso es lo que queremos decir cuando hablamos de tolerancia. Tolerancia no es transigir de modo paternalista o condescendiente, tampoco es pasar por alto o condonar lo que no puede ser omitido, ni mucho menos la oscilación entre el relativismo y el nihilismo, o incluso la actitud perezosa de quien suspende su juicio por comodidad. Tolerancia es democracia porque no hay democracia si no existe el gobierno con el consentimiento de los gobernados basado en el reconocimiento mutuo. Democracia es tolerancia porque sin la aceptación de la razón del otro no hay convivencia posible”.

Para el miembro del Soberano Consejo de Gobierno del SCME, la tarea de la masonería y su labor filosófica es ante todo sociopolítica: “La masonería es una idea en acción, la acción de resistencia ante la antiilustración, una idea cuyo momento llegó hace tiempo y cuya urgencia viene determinada por la aceleración del tiempo que estamos viviendo, una aceleración propia de la sociedad compleja que ejerce el efecto engañoso de inmovilidad cuando es un deslizamiento vertiginoso hacia la destrucción de la civilización. Los masones somos la resistencia ante ese proyecto de destrucción y somos los constructores de edificios, caminos y puentes que eviten el avance de nuestro enemigo y nos permitan a nosotros avanzar. Masones filosóficos operativos capaces de convertir las ideas no tangibles pero reales en los bloques de piedra con los que construir, como siempre hemos hecho, el Templo de la Humanidad a la gloria de la Libertad, la Igualdad y la Fraternidad”.

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